“No es necesario maltratar a la naturaleza para crear un bello vestido”
El diseñador de alta costura Carlos Mario Miranda dialogó con LA CRÓNICA y contó cómo es el mundo de los reinados de belleza, el que catalogó como de ‘fantasía’.
Quien ha sido el diseñador de las reinas de Canadá y Uruguay en los últimos años, el antioqueño Carlos Mario Miranda reveló que en la actualidad los materiales para la creación de hermosos vestidos son sintéticos, por lo que no es necesario maltratar a la naturaleza.
En entrevista con LA CRÓNICA, este hijo de Yarumal, Antioquia, y quien desde los 7 años ya dibujaba siluetas femeninas y las adornaba, relató que el mundo de las reinas de belleza es una fantasía, la que ha disfrutado, pero que él prefiere la realidad.
¿Cómo fueron sus inicios en el diseño?
Para mí, el diseñador es una persona que se forma en una escuela en la técnica del diseño, sin embargo mi caso es empírico, yo nací siendo diseñador. Desde los 7 años era obsesionado por dibujar figuras femeninas, que luego hacía en plastilina y con papel o cualquier recurso que encontraba, les hacía los vestidos.
Para mí, el diseñador es una persona que se forma en una escuela en la técnica del diseño, sin embargo mi caso es empírico, yo nací siendo diseñador. Desde los 7 años era obsesionado por dibujar figuras femeninas, que luego hacía en plastilina y con papel o cualquier recurso que encontraba, les hacía los vestidos.
¿Recuerda cuál fue su primer diseño?
De Yarumal llegué a Medellín donde nos radicamos con mi familia. A los 14 años hice mi primer diseño, cuando una amiga necesitaba un vestido y no podía pagar los gastos de uno. Así que le dije que buscáramos los recursos y encontramos una bandera de Colombia, y le hice el diseño. Con esa creación ganó, y descubrí que ese era mi talento, y creo que moriré diseñando vestidos.
De Yarumal llegué a Medellín donde nos radicamos con mi familia. A los 14 años hice mi primer diseño, cuando una amiga necesitaba un vestido y no podía pagar los gastos de uno. Así que le dije que buscáramos los recursos y encontramos una bandera de Colombia, y le hice el diseño. Con esa creación ganó, y descubrí que ese era mi talento, y creo que moriré diseñando vestidos.
¿Ese fue su ingreso al mundo de las reinas?
Podría ser... El vestido de la bandera de Colombia fue para un reinado. Al comienzo no conocía mucha gente en el medio, luego fui conociendo y me di a conocer, pero mi ingreso formal fue cuando empecé a trabajar con la Señorita Antioquia, en donde ayudé a varias candidatas. Vestí además a una reina Nacional del Café.
Podría ser... El vestido de la bandera de Colombia fue para un reinado. Al comienzo no conocía mucha gente en el medio, luego fui conociendo y me di a conocer, pero mi ingreso formal fue cuando empecé a trabajar con la Señorita Antioquia, en donde ayudé a varias candidatas. Vestí además a una reina Nacional del Café.
¿Y su llegada a las ‘grandes ligas’ del diseño del vestuario para reinas universales?
En el 2007, yo trabajaba con otro diseñador, yo era su asistente y quien hacía los vestidos. Tuvimos unas diferencias y decidí montar mi propia marca. Un día me llamaron para hacer un vestido a una niña que cumplía 16 años en Miami. Lo confeccioné y fui a la fiesta, y entre los invitados estaba el director del concurso Miss Canadá. Él preguntó que quién había hecho el vestido y mi hermano, me presentó con él. Al conocerme, me ofreció ser jurado del concurso Miss Canadá y luego me ofreció que vistiera a la ganadora para Miss Universo. Esa fue la entrada, llegar hasta allá sin haber pasado por reinados regionales, o de Señorita Colombia, era algo que nunca había pensado.
En el 2007, yo trabajaba con otro diseñador, yo era su asistente y quien hacía los vestidos. Tuvimos unas diferencias y decidí montar mi propia marca. Un día me llamaron para hacer un vestido a una niña que cumplía 16 años en Miami. Lo confeccioné y fui a la fiesta, y entre los invitados estaba el director del concurso Miss Canadá. Él preguntó que quién había hecho el vestido y mi hermano, me presentó con él. Al conocerme, me ofreció ser jurado del concurso Miss Canadá y luego me ofreció que vistiera a la ganadora para Miss Universo. Esa fue la entrada, llegar hasta allá sin haber pasado por reinados regionales, o de Señorita Colombia, era algo que nunca había pensado.
¿A cuántas reinas ha vestido para Miss Universo?
Desde el año 2007 y hasta el año pasado vestí a las candidatas de Canadá y Uruguay. Con la primera Miss Canadá, ella vino hasta Medellín para hacer las pruebas, le entregué los diseños y el vestuario. A través de las directivas de ese país tuve la oportunidad de trabajar con la niña de Uruguay. Recuerdo, por ejemplo a Giannina Carla Silva Varela, que en el reinado celebrado en México fue la más elegante en traje de noche. Así se me han abierto las puertas de los reinados.
Desde el año 2007 y hasta el año pasado vestí a las candidatas de Canadá y Uruguay. Con la primera Miss Canadá, ella vino hasta Medellín para hacer las pruebas, le entregué los diseños y el vestuario. A través de las directivas de ese país tuve la oportunidad de trabajar con la niña de Uruguay. Recuerdo, por ejemplo a Giannina Carla Silva Varela, que en el reinado celebrado en México fue la más elegante en traje de noche. Así se me han abierto las puertas de los reinados.
¿Alguna anécdota en sus trabajos con candidatas a Miss Universo?
Claro. En 2010, trabajé para la señorita de Irlanda, a quien le diseñé el vestido para la coronación. Ella en el transcurrir del concurso hizo un convenio con la señorita Japón, de que si alguna llegaba al grupo de las diez finalistas, la otra le daba el vestido que tenía para la coronación y lo lucía. En esa oportunidad Irlanda pasó y Japón no, así que Irlanda vistió el de Japón, y el que yo le había diseñado, ella se lo cedió a la candidata de Australia.
Claro. En 2010, trabajé para la señorita de Irlanda, a quien le diseñé el vestido para la coronación. Ella en el transcurrir del concurso hizo un convenio con la señorita Japón, de que si alguna llegaba al grupo de las diez finalistas, la otra le daba el vestido que tenía para la coronación y lo lucía. En esa oportunidad Irlanda pasó y Japón no, así que Irlanda vistió el de Japón, y el que yo le había diseñado, ella se lo cedió a la candidata de Australia.
En ese evento, Irlanda no pasó de las diez, y Australia sí, quien llegó hasta las 5 y ella lució mi vestido. Después del concurso me llamó a darme las gracias por el vestido. Esas son cosas que son muy gratificantes para uno.
¿Ha vestido candidatas para el reinado Nacional de la Belleza en Cartagena?
Solo hasta el año pasado fui a Cartagena con un vestido para la niña de Chocó y fue el más ‘bien comentado’ por los ‘reinólogos’. Eso te llena, porque eso te engrandece pero uno debe vivir de la realidad. Yo vivo contento con mis clientas particulares, aquellas que no son reinas de belleza, pero si hay otra oportunidad de vestir a una señorita en Colombia, bienvenida, pero no es mi preocupación.
Solo hasta el año pasado fui a Cartagena con un vestido para la niña de Chocó y fue el más ‘bien comentado’ por los ‘reinólogos’. Eso te llena, porque eso te engrandece pero uno debe vivir de la realidad. Yo vivo contento con mis clientas particulares, aquellas que no son reinas de belleza, pero si hay otra oportunidad de vestir a una señorita en Colombia, bienvenida, pero no es mi preocupación.
¿Los reinados son una fantasía?
Sí. Yo admiro mucho a Alfredo Barraza, me parece muy lindo lo que hace. Él es el diseñador más grande de reinas del país y el mundo. La mayoría de soberanas lo buscan a él, porque tiene muchos conocimientos, y sabe cómo una niña puede ser Miss Colombia, pero ese mundo es una fantasía y yo prefiero la realidad.
Sí. Yo admiro mucho a Alfredo Barraza, me parece muy lindo lo que hace. Él es el diseñador más grande de reinas del país y el mundo. La mayoría de soberanas lo buscan a él, porque tiene muchos conocimientos, y sabe cómo una niña puede ser Miss Colombia, pero ese mundo es una fantasía y yo prefiero la realidad.
¿Y cuál es la realidad?
Es donde no hay bulla, el de la clienta sencilla, la que va a mi taller y me solicita un vestido para una ocasión especial, esa es la realidad, la que genera ganancia, porque el mundo de las reinas es muy bonito pero difícil. Las reinas no facturan, ellas todo lo piden de gratis o prestado. Lo que da ese mundo es nombre y un alto riesgo, porque se puede hasta volver peligroso.
Es donde no hay bulla, el de la clienta sencilla, la que va a mi taller y me solicita un vestido para una ocasión especial, esa es la realidad, la que genera ganancia, porque el mundo de las reinas es muy bonito pero difícil. Las reinas no facturan, ellas todo lo piden de gratis o prestado. Lo que da ese mundo es nombre y un alto riesgo, porque se puede hasta volver peligroso.
¿Qué tipo de peligros?
No sé si usted recuerda al diseñador Miguel de la Torre que vistió a una niña de Canadá. Ella ganó en Miss Universo y cuando eso pasó una gente estuvo detrás de él por haber sido el diseñador de ella, porque hay gente que le busca la caída a quien tiene algún tipo de éxito.
No sé si usted recuerda al diseñador Miguel de la Torre que vistió a una niña de Canadá. Ella ganó en Miss Universo y cuando eso pasó una gente estuvo detrás de él por haber sido el diseñador de ella, porque hay gente que le busca la caída a quien tiene algún tipo de éxito.
¿Cuál es su sello en la alta costura?
Uno debe saber cuál es su fuerte. A mí me gustan los vestidos de alta costura, porque uno de calle no es tan exigente, porque no tiene tantos elementos, no hay tanta creatividad. Los de alta costura te exigen que estés creando y tengan tu sello. Por ejemplo, a mí me gusta lo sexy, los escotes, la espalda, aberturas y transparencias. Como diseñador uno debe tener su sello propio y que la gente cuando vea un vestido sepa quién lo diseñó.
Uno debe saber cuál es su fuerte. A mí me gustan los vestidos de alta costura, porque uno de calle no es tan exigente, porque no tiene tantos elementos, no hay tanta creatividad. Los de alta costura te exigen que estés creando y tengan tu sello. Por ejemplo, a mí me gusta lo sexy, los escotes, la espalda, aberturas y transparencias. Como diseñador uno debe tener su sello propio y que la gente cuando vea un vestido sepa quién lo diseñó.
¿Esas creaciones son muy costosas?
La moda ha cambiado mucho, la moda ya no es tan convencional, no es tan formal. Ahora los vestidos no son tan costosos, están en promedio en $2 millones, aunque algunos pueden llegar a los 20 o 30 millones de pesos, eso depende de los insumos. En la actualidad hay materiales que son menos costosos y un vestido que hace años podía costar hasta 40 millones de pesos, ahora puede valer $2 millones, dependiendo de quien lo haga.
La moda ha cambiado mucho, la moda ya no es tan convencional, no es tan formal. Ahora los vestidos no son tan costosos, están en promedio en $2 millones, aunque algunos pueden llegar a los 20 o 30 millones de pesos, eso depende de los insumos. En la actualidad hay materiales que son menos costosos y un vestido que hace años podía costar hasta 40 millones de pesos, ahora puede valer $2 millones, dependiendo de quien lo haga.
¿En el tema de los insumos, los materiales, aún se usan elementos provenientes de animales?
Ya no es necesario maltratar la naturaleza para tener materiales de buena calidad y hermosos, ahora todo es sintético. El material primario o natural es muy costoso, y no vale la pena si se tiene lo alternativo que es de excelente calidad y además igual de bonito que lo natural.
Ya no es necesario maltratar la naturaleza para tener materiales de buena calidad y hermosos, ahora todo es sintético. El material primario o natural es muy costoso, y no vale la pena si se tiene lo alternativo que es de excelente calidad y además igual de bonito que lo natural.
Para finalizar, ¿cuál es su inspiración?
La mujer es la fuente de inspiración de todos los diseñadores. Para mí, es la mujer disciplinada, que se cuida, que tiene un cuerpo bonito, que ya no recurre a las cirugías para verse bella, sino que sabe que para estar bien, saludable y bonita, debe cuidarse... Esa es mi inspiración, la mujer que se cuida y quiere verse bonita, no para un hombre, sino para ella misma.
La mujer es la fuente de inspiración de todos los diseñadores. Para mí, es la mujer disciplinada, que se cuida, que tiene un cuerpo bonito, que ya no recurre a las cirugías para verse bella, sino que sabe que para estar bien, saludable y bonita, debe cuidarse... Esa es mi inspiración, la mujer que se cuida y quiere verse bonita, no para un hombre, sino para ella misma.
http://www.cronicadelquindio.com/noticia-completa-titulo-no_es_necesario_maltratar_a_la_naturaleza_para_crear_un_bello_vestido-seccion-la_salida-nota-98955
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